Volvieron las algas tóxicas a las aguas del Río

Fuente: diario El Dia de La Plata , miércoles 23 de febrero de 2005
Volvieron a aparecer las algas tóxicas en el Río de La Plata. El fenómeno, favorecido por las condiciones del clima y la gran cantidad de desechos orgánicos presente en el agua, tuvo su pico durante la jornada del domingo, y ayer dejó evidentes huellas sobre la arena y el limo de las playas de Punta Lara.

Desde diferentes organismos oficiales -la secretaría de Política Ambiental bonaerense, por un lado, y por otro el municipio de Ensenada- se calificó al problema como "menos grave" que el año pasado, cuando la "invasión" de cianobacterias se registró desde fines de diciembre. Pero a la vez se volvió a recomendar enérgicamente a la población que evite, por el momento, tomar contacto con el agua del Río.

Según explicó Raúl Panettieri, director de Medio Ambiente de Ensenada, "por ahora no es aconsejable que la gente tome contacto con el agua, especialmente en los lugares en donde se observen tonalidades verdosas. Ya se alertó sobre la situación a clubes, guardavidas y unidades sanitarias, para que dentro de lo posible contribuyan a concientizar a los turistas".

Toparse con un panorama de aguas y arenas teñidas de verde claro, luminoso, es cada vez más frecuente entre los cursos de agua de nuestra región. Cuando se suceden varios días con temperaturas cercanas a los treinta grados, las aguas estancadas o relativamente quietas, con alta concentración de materia orgánica y poco oxígeno, se convierten en caldo de cultivo ideal para una clase de algas conocida como cianobacteria, cuya ruptura libera compuestos venenosos.

Desde Política Ambiental de la Provincia se explicó que "existe un plan de monitoreo de las costas del Plata y el Salado, que se implementó el año pasado y se mantiene durante las cuatro estaciones. Los informes sobre presencia de algas se remitieron a todos los municipios involucrados -junto con folletería para informar a la gente- ya que las recomendaciones de baño las debe dar cada comuna. Nuestra posición -que coincide con lo aconsejado por la Organización Mundial de la Salud- es la de que no se debe tomar ningún tipo de contacto con el agua ni consumir productos extraídos de ella".

Lo cierto es que a pesar de esas directivas, de los afiches pegados en las carteleras de diferentes recreos, y de los folletos distribuidos por la Comuna ensenadense -incluso de las banderas que indicaban "río peligroso"- tanto el domingo como ayer se contaron por centenares los grandes y chicos que se bañaron en el Río. Para hacerlo, atravesaron los rastros de verde casi flúo que había dejó en la arena, 24 horas antes, el florecimiento de las algas.

UNA AMENAZA LATENTE

A comienzos del año pasado, sucesivos estudios a cargo de organismos oficiales y de la Universidad Nacional de La Plata confirmaron la presencia "masiva" de algas generadoras de toxinas potencialmente peligrosas para la salud humana, del tipo "microcystis aeruginosa" y "anabaena spiroides" en ambos extremos del canal de acceso al Puerto La Plata. También se constató la existencia de "toxinas hepatotóxicas", llamadas microcistinas a partir del nombre del alga que las libera.

Las microcystis aeruginosa -o "algas verdeazuladas"- son cianobacterias que cuando alcanzan altas densidades llamadas "florecimientos" generan importantes cantidades de una toxina -la microcistina- que puede resultar fatal; en el caso de intoxicación aguda, afecta al hígado en especial y al tracto digestivo en general, pudiendo provocar la muerte por coma hepático; mientras que en menores dosis presenta un cuadro sintomatológico muy parecido al del cólera, con diarreas, vómitos, mareos, fiebre y malestar general.

Una vez que se producen los "florecimientos" de las algas se puede observar en la superficie del agua una espuma verdosa, de naturaleza generalmente pasajera y distribución sumamente variable, que en sus momentos de mayor concentración comienza a despedir un fuerte y desagradable olor -similar al de un insecticida-. La toxicidad de estas espumas puede variar rápidamente en tiempo y espacio, por lo que la población de cianobacterias de un curso de agua específico no implica necesariamente un peligro para los seres humanos, siempre y cuando las células permanezcan dispersas. Cuando aparecen brotes masivos, y se percibe la presencia de espuma, ya representan un riesgo.

La microcistina es una toxina que no se elimina con la potabilización tradicional. Si embargo, desde Aguas Bonaerenses (ABSA), la Autoridad de Aguas (ADA) y el Organismo Regulador de Aguas Boneerenses (ORAB) se garantizó en repetidas oportunidades "la total potabilidad" del servicio cuya toma principal está río adentro, en Punta Lara.

La reaparición de algas cianotóxicas se suma a los factores de contaminación "tradicionales" en un Río cada vez más degradado que recibe a diario miles de toneladas de desechos cloacales e industriales sin tratamiento alguno. Por caso, la cloaca mayor del Conurbano sur y parte de la capital, que vierte su carga a la altura de Berazategui.